La decisión de que un país africano
organizase el mundial del 2010 y solo se admitiesen candidaturas africanas, se
extendió para asegurar la rotación periódica del torneo. Así para 2014, la FIFA
solo aceptó candidaturas americanas. Colombia y Brasil presentaron sus
candidaturas, pero los colombianos retiraron su candidatura antes del congreso
de la FIFA y en octubre del 2007, Brasil fue designada sede de la Copa del
mundo 2014.
El balón de esta edición fue el Adidas
Brazuca, un balón con la trayectoria de vuelo más estable de los producido
hasta entonces. La mascota de este torneo fue Fuleco, un armadillo de 3 bandas
brasileño cuyo nombre proviene de la fusión de las palabras Futbol (Ful-) y
Ecología (-eco).
En esta edición volvieron participar
todos los campeones históricos y el balón comenzó a rodar el 12 de junio en el
Estadio Corinthias Arena de Sao Paulo, donde los anfitriones derrotaron a
Croacia por 3 a 1.
La primera fase deparó algunas sorpresas
sonadas, como la eliminación de España, la vigente campeona, que cayó derrotada
en su primer partido por 1 a 5 contra Holanda, precisamente la subcampeona del
torneo anterior. También fueron eliminadas Italia, Inglaterra y Portugal. De
los 16 equipos que pasaron a octavos de final, 8 fueron americanos, 6 europeos
y 2 africanos, Argelia y Nigeria, cosa que ocurría por primera vez en la
historia.
En la fase final, los resultados fueron
muy igualados, resolviéndose la mayoría de encuentros en el tiempo suplementario
o en la tanda de penaltis. El pronostico se cumplió y las 4 selecciones más
potentes se jugaron las semifinales, que enfrentaron a equipos europeos contra
americanos, así Alemania se enfrentó a Brasil y Holanda a Argentina. Los
anfitriones fueron derrotados en un histórico partido en el que fueron
derrotados por 7 a 1. Este partido significó la peor derrota de la selección de
Brasil en toda su historia futbolística, Alemania en 6 minutos pasó del 0-1 al
0-5, y se le conoce como el Mineirazo, ya que se disputaba en el estadio
Mineirao de Belo Horizonte.
En la otra semifinal Argentina derrotó a
Holanda en los penaltis.
En la final disputada el 13 de julio en el estadio
Maracaná de Rio de Janeiro, Alemania derrotó a la Argentina de Leo Messi, quien
a pesar de perder la final fue considerado mejor jugador del torneo, en el
tiempo suplementario.
Alemania se convirtió en campeón del mundo por 4ª vez y siendo
la primera selección europea que ganaba un mundial en suelo americano.
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